Un jugador de leyenda

Dallas ya está en la final de la NBA. Empezó eliminando a Portland en 6 partidos, despues barrió a Lakers y ahora casi endosa otro sweep a Oklahoma.

Todos estaremos de acuerdo en que hay un jugador que está destacando en estos playoffs por encima de todos, y ese es el gran Nowitzki (con el permiso de Lebron). Hacía tiempo que no se veían unos porcentajes en playoffs similares a los que acumula el alemán, más del 60% en TC y más del 92% en FT (algo que no se veía desde que un tal Larry, de apellido Bird, hiciera algo similar en el 87), porcentajes que le ayudan a promediar 28,4 puntos por partido, lo que vienen a ser unos numerazos. Digno de un MVP y futuro Hall of Fame.

Un servidor pensaba allá por Octubre cuando le renovaron su contrato que los Mavs se habían vuelto locos, que se agarraban como a un clavo ardiendo a su jugador franquicia, que tiene 32 años, hipotecándose con un contratazo de 5 años. Pero este jugador me ha sorprendido, justo cuando esperaba un bajón en su juego llegan los playoffs y empieza a derrochar raza y clase a quintales. 

Muchos pensamos que la defensa de Gasol ayudaba bastante, pero tras ver como noche tras noche ha desquiciado al mejor taponador y uno de los mejores defensores de la liga como es Ibaka, nos damos cuenta de que estamos ante un jugador muy muy especial. No sabemos que pasará en las finales, pero me tengo que quitar el sombrero ante Nowitzki, sin duda alguna un jugador que se merece un anillo.

No quiero olvidarme tampoco de algunos componentes a destacar en Dallas. Es obligado hacer una mención especial a un jugador que sin ser drafteado y sin llegar al 1,80 se ha convertido en un pedazo de base. Jose Juan Barea se sobrepone a sus limitaciones físicas demostrando que de talento no es tan "corto" ni mucho menos.

Y otro jugador renacido es Chandler. Se nota que ha trabajado su tiro libre, se nota que está a tope físicamente y eso le ayuda a ser un intimidador de primer nivel (lo que se pensaba cuando se le drafteó). Sabe rebotear en ambos lados de la pista y se complementa a las mil maravillas con Dirk. 

Para terminar con las menciones, destacar el momento dulce que vive Terry.

En definitiva, bravo por Dallas y enhorabuena a sus aficionados por el título de conferencia.

En el próximo post hablaremos de Oklahoma y de Westbrook, que está en el ojo del huracán.