Victoria de Dallas Mavericks en el quinto partido de las finales, por lo que dispone de dos partidos para ganar el anillo. Eso si, ahora la serie viaja a Miami, la cosa será muy diferente y el big trhee se sentirá mucho más comodo, en especial Lebron.
Como comentaba en el último post, esperaba un Lebron decidido a sacudirse las críticas, y así fue. En la primera jugada, James saltó a por el rebote de un tiro libre como si el balón fuera el mismísimo anillo. Hoy toca triple doble pensé, y no iba mal encaminado. Jugó un partido serio, sin precipitarse, tirando los tiros que tenía que tirar, penetrando y buscando a sus compañeros. Pero en el último cuarto,,,,, ¡Ay el último cuarto! No sólo Lebron pegó un bajón terrible, sino que todos los Heat se atascaron como ya vienen haciendo en toda la serie cuando la cosa se calienta (¿falta un base que dirija el ataque?).
Si maimi quiere el anillo tendrá que llegar con ventaja en estos partidos a los minutos calientes, porque la veteranía de Dallas se impone, con un Dirk excelso en sus decisiones de cara al aro al igual que Terry, que viene de menos a más en esta serie. Chandler sigue siendo un dolor de muelas, coge muchos rebotes en ataque y saca muchas faltas en defensa. Y para júbilo de los texanos, Barea hizo su aparición estelar en la serie, dando todo un recital de tiro y poder de penetración.
Para tranquilizar a los seguidores de Miami, decir que los porcentajes de tiro de 3 que tuvo Dallas no se repetirán fácilmente, eso sí, el alto porcentaje de tiros de campo durante gran parte del partido de los Mavericks refleja cierto bajón en la defensa de los Heat.
Con todo esto, fue de largo el mejor partido de estas serie, vibrante y todo un espectáuclo anotador. Las cámaras detrás de Lebron todo el rato, reflejando por momentos su incomodidad en la pista (algo que nunca había visto). Quizás por la dura defensa de los Mavs (durante la retransmisión se pudo ver una repetición de una de fensa de Marion sobre James en la que el de Dallas no dejaba de gritar Lebron mientras este posteaba).
Esta noche veremos como les sienta el cambio de pista a los dos equipos. Mi pronóstico es una victoria de Miami, alentado por su público y por una intensidad renovada, por lo que confio en el séptimo partido. Eso si, con las recientes burlas de Wade y Lebron acerca del estado de salud de Nowitzki (tapándose con la toalla constantemente durante el cuarto partido por su estado febril) podemos ver un gran partido del alemán, y eso puede ser sinónimo de victoria para Dallas.
Esta noche a las 2 sigue el espectáculo, I LOVE THIS GAME!!!!!
Saludos.
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